Jaguares

Jaguares fue mucho más que una banda de rock alternativo mexicana; fue un símbolo de la evolución de la música en español y un testimonio del poder transformador del arte. Todo comenzó cuando Saúl Hernández, exvocalista de Caifanes, tuvo un sueño. En su mente, estaba cantando dentro de la boca de un jaguar, y así, nació Jaguares. Acompañado por Alfonso André en la batería, y dos amigos de siempre, Federico Fong en el bajo y José Manuel Aguilera en la guitarra principal, Jaguares comenzó su recorrido.
El éxito fue inmediato. Su primer álbum, El Equilibrio de los Jaguares, dejó huella en la escena musical, pero el destino tenía otros planes. Hernández fue diagnosticado con cáncer causado por el virus del papiloma humano, lo que lo obligó a detenerse en seco. Durante esa pausa de un año, Aguilera abandonó la banda, y Fong también se tomó un descanso. Ambos siguieron con su proyecto paralelo, La Barranca. En medio de esa incertidumbre, apareció una figura legendaria: César “El Vampiro” López, exmiembro de Maná y Azul Violeta, se sumó como guitarrista principal, mientras que Sabo Romo, el icónico bajista de Caifanes, también aceptó la invitación. Con esta nueva formación, Jaguares lanzó su segundo álbum, Bajo el Azul de Tu Misterio.
Pero la historia de Jaguares no solo fue de entradas y salidas. Fue un viaje marcado por desafíos, reinvenciones y, sobre todo, resistencia. Tras Cuando La Sangre Galopa en 2001, la banda atravesó cambios constantes. En 2005, Federico Fong regresó para el álbum Crónicas de un Laberinto, un trabajo que solidificó su lugar en el rock en español. En 2007, Diego Herrera, otro ex-Caifanes, se unió para la promoción del álbum 45, un disco que llevaba en su título una cruda realidad: los 45 millones de mexicanos que vivían en pobreza en ese momento.
Ese mismo año, Jaguares también participó en un proyecto que resonó en el mundo. Contribuyeron con su versión de “Gimme Some Truth” de John Lennon para Instant Karma: The Amnesty International Campaign to Save Darfur. La banda utilizó su plataforma para alzar la voz por los que no podían, una constante en su carrera.
Finalmente, en 2010, Jaguares tomó una pausa, lo que muchos pensaron sería temporal. Saúl Hernández decidió enfocarse en su carrera solista y, al mismo tiempo, llegó el esperado regreso de Caifanes.
Pero la leyenda de Jaguares no terminó ahí. En 2019, sorprendieron al anunciar su regreso para un único concierto en el Machaca Fest en Monterrey. Fue un recordatorio de que, aunque el tiempo pase, la fuerza de una banda como Jaguares, nacida en los sueños de un jaguar, permanece viva.



