La Barranca

La Barranca, un distinguido grupo musical de la Ciudad de México, fue fundado a mediados de la década de 1990 por el guitarrista y compositor José Manuel Aguilera, junto con el bajista Federico Fong. Su sonido combina el rock con elementos del folclore mexicano, creando una fusión única de estilos que ha evolucionado a través de varias encarnaciones de la banda. A lo largo de los años, La Barranca se ha convertido en un nombre fundamental en la escena musical independiente de México, ampliamente reconocidos por su enfoque innovador en la composición y su capacidad para adaptarse a nuevas influencias sin perder su identidad distintiva.

Primeros Años y Formación

La Barranca comenzó informalmente a finales de 1994, cuando José Manuel Aguilera y Federico Fong se reunieron en la Ciudad de México para grabar algunas canciones en una grabadora de cuatro pistas. La música que crearon durante esa sesión insinuaba una nueva dirección para ambos músicos, un sonido que destacaba en el panorama del rock mexicano. Aguilera y Fong, quienes habían tocado juntos por primera vez en 1992 como parte del efímero proyecto La Suciedad de las Sirvientas Puercas, se reunieron después de trabajar por separado en otros proyectos, incluyendo la banda Sangre Azteka, donde Fong había colaborado con Aguilera.

Para 1995, el baterista Alfonso André, también parte de La Suciedad de las Sirvientas Puercas y posteriormente Jaguares, se unió a Aguilera y Fong, completando el trío que se convertiría en La Barranca. Juntos grabaron su álbum debut, El Fuego de la Noche, en Guadalajara. La recepción del álbum fue abrumadoramente positiva, ganando elogios de la crítica y posicionando a la banda como una revelación en la escena del rock mexicano. El grupo también fue pionero en la producción independiente, lanzando inicialmente el álbum a través del ahora extinto sello independiente Opción Sónica.

Ascenso a la Fama y Evolución

El segundo álbum de la banda, Tempestad, lanzado en 1997, solidificó su reputación. Grabado en la Ciudad de México y apoyado por una base de fanáticos en crecimiento, Tempestad marcó una nueva fase para La Barranca, ganando elogios de publicaciones especializadas como la revista La Mosca, que más tarde lo nombró uno de los álbumes de “La Nueva Música Clásica” de México.

Después de Tempestad, la banda emprendió su tercer álbum, Rueda de los Tiempos, una producción independiente que incluía una gama más amplia de instrumentos y loops electrónicos, expandiendo aún más su sonido. Durante este período, el guitarrista Alex Otaola de Santa Sabina comenzó a colaborar con La Barranca, eventualmente uniéndose a ellos de forma permanente.

Los Años 2000 y la Reinvención

En 2001, la banda tomó un breve descanso cuando Federico Fong se mudó al extranjero, y José Manuel Aguilera exploró proyectos en solitario. Durante este tiempo, la alineación cambió, y los hermanos Alonso y José María “Chema” Arreola se unieron a la banda, junto con Otaola. Este nuevo cuarteto grabó dos álbumes: Denzura (2003) y Cielo Protector (2004), ambos bien recibidos por la crítica. Este último álbum se lanzó exclusivamente a través de pedidos por Internet, consolidando aún más a La Barranca como pioneros en la escena musical independiente.

En 2005, la banda lanzó El Fluir, grabado en vivo en Monterrey con mínimas intervenciones de estudio. Elogiado por Rolling Stone y otras publicaciones, incluyó temas destacados como “Zafiro” y “Pare de Sufrir.”

Reunión y Éxito Continuado

En 2007, los miembros originales Alfonso André y Federico Fong se reunieron con Aguilera para grabar Providencia (2008), un álbum fundamental para la banda que recibió elogios generalizados. Este álbum fue seguido por Construcción, una colección de demos e instrumentales descartados de Providencia.

La Barranca continuó su evolución en la siguiente década, lanzando Piedad Ciudad en 2010, un álbum celebrado como uno de los mejores del rock mexicano de la década. Este período también los vio colaborar con una amplia gama de músicos, incluyendo a Alfonso André, Cecilia Toussaint y Yamil Rezc.

En 2013, La Barranca presentó Eclipse de Memoria, un álbum que exploró temas de la memoria y el tiempo, con nuevas texturas musicales como marimbas e instrumentos de viento. Este álbum marcó una fase madura para la banda, con temas destacados como “El Tiempo es Olvido” y “Ante la Ley.”

Últimos Años y Legado

En 2015, La Barranca celebró su 20 aniversario con un concierto especial en el Teatro de la Ciudad de México y el Teatro Diana de Guadalajara. Continuaron esta celebración con una gira por Estados Unidos, presentándose en ciudades como Los Ángeles, Houston y Chicago. Su actuación en el Vive Latino de 2017, que incluyó tanto a la alineación original como a la actual de la banda, se convirtió en un momento crucial en su carrera, demostrando su relevancia perdurable.

La discografía de La Barranca fue incorporada al Archivo Nacional de Sonido de México en 2014, consolidando su lugar en la historia musical de la nación.

En 2018, La Barranca lanzó su undécimo álbum de estudio, Lo Eterno, continuando su legado como una de las bandas de rock más innovadoras y duraderas de México.


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